Éste cambio social repercute directamente en el discurso de marca, esto se observa siguiendo un recorrido histórico, en donde en los orígenes: la comunicación se basaba en beneficios del producto, con el fin de presentar soluciones a los problemas del consumidor. Mientras que con la llegada de la industrialización, la marca se presenta en un nuevo espacio inmerso en tecnologías, esto da lugar a una metamorfosis dejando atrás los aspectos funcionales para comunicar aspectos emocionales, este cambio social, se refleja en la sociedad donde pasa de ser una sociedad racional a ser una sociedad emocional (Capriotti, 2007;Costa, 2006) , es entonces que el público a quién se dirige la marca pertenece en la actualidad a una sociedad emocional, es por ello que la marca tiene la necesidad de amoldar su discurso, basado en atributos significativos para poder tener una llegada.